(Religión Digital. Xavier Pete).
En un tanatorio de la archidiócesis de Barcelona, hace tan sólo unas semanas, un hijo y una hija despedían a su padre, que murió cristianamente días antes, de forma natural y siendo viudo de su esposa. Familiares, amigos y conocidos del difunto se congregaban en este espacio de respeto y acompañamiento sin que la escena —la más habitual en este tipo de entornos— trascendiera la normalidad. Sin embargo, un detalle sorprendió a todos los presentes: las exequias fueron celebradas por una religiosa . Se trataba de Conchi García (El Ejido, 1977), de las Hermanas Dominicas de la Presentación.