Monseñor José Antonio Canales ofrece una mirada íntima a su reencuentro en Roma con su amigo, monseñor Rolando José Álvarez Lagos; destaca la relevancia y la estima que el Papa Francisco tiene por el obispo de Matagalpa que, aunque perseguido y maltratado en Nicaragua, sigue siendo “un obispo valioso para la Iglesia universal”